Os presento a Indalecio!

Madre en sentido literal y biológico del término, ya lo he dicho en muchas ocasiones, que no soy... pero "madrecita" de muchas otros seres y creaciones... sin duda alguna!

Ya es harto sabido, por muchas de vosotras, la devoción que tengo por mis sobrinos y lo mucho que disfruto de ellos y practico agradecida y complacida el placer de ser tieta, y no me confundo, soy su tía y no su madre. Pero hay ocasiones en las que me siento creadora absoluta de alguna nueva obra, me siento un poco madre... no sentís las mamás la sensación de ser la creadoras de vuestros hijos?... pues un sentimiento semejante (que no igualable) siento yo, ante creaciones propias como Indalecio!

Si gustáis de seguir leyendo, os explico la "gestación, embarazo y alumbramiento" de Indalecio.

En la prolífica, aunque agotadora, época en la que Paco y yo iniciamos nuestro periplo y aventura de las camisetas del planB, se gestó la imagen y morfología de Indalecio. Como algunas sabéis, Paco tiene una habilidad innata para el dibujo y aprovechándonos de ese filón, él esbozó y perfiló hasta el más mínimo detalle, toda una serie de dibujos y diseños para nuestras camisetas que luego pintábamos a mano... se le antojó entonces dibujarle... cuando vi el boceto le dije entusiasmada: "Qué divertido! me encanta! Cómo se llama?" y en su siempre afán de hacerme reír y contemplar a la vez, mi cara de estupor ante algunas de sus respuestas, me dijo todo serio: "Indalecio, se llama Indalecio" y por más que quisimos, luego, cambiarle el nombre, ya no pudimos.

Pintamos entonces algunas camisetas infantiles con el diseño de Indalecio, que por cierto tuvieron grandísima y cálida acogida, he aquí alguna muestra...

... una ampliación del diseño, aunque no de mucha calidad pues está escaneada de una foto que ya en su día tenía poco contraste...

... y mientras tanto yo "barruntaba y barruntaba" (rumiaba) en mi cabecita incansable (ella no se cansa de pensar, yo si! Ella tiene autonomía propia y muchas veces, en contra de mi propia voluntad, continúa pensando y volteando ideas y pensamientos hasta el agotamiento mío! Si mi cerebro tuviera interruptor... cuantas veces lo hubiera desconectado! Pero bueno, este es otro tema, del que yo creo que pudiera debatirse mucho... pero, para otra ocasión!) ... estaba... ah si! "barruntando" la idea de dar 3D a Indalecio y por sorpresa presentárselo un día a "su padre".

Así que, "barruntado, barruntando", casi sin darme cuenta, fui reuniendo los elementos que podían acabar componiéndole; unos retales que me habían sobrado de un pichi de invierno (que aunque me encanta, nunca estrené... porque mi silueta no es la de "Amelie" -me hubiera encantado- y ese pichi parecía haber salido directamente de su guardarropa), un poco de fieltro, alambres varios, hilos de bordar, unos ojitos, pintura para darles vida, un poco de medias de color, hilo de punto de cruz y muuuuucho miraguano (esa especie de algodón de relleno)... mientras recopilaba todas esas cositas iba dibujando en papel lo que habrían de ser los patrones de Indalecio... un par de pruebas con celo y papel para verificar la forma de su cabecita... y... un día del turno de tarde de Paco, me puse manos a la obra... cuando llegó por la noche, no le dejé pasar de la puerta, hasta que yo hube recogido toda la "parada", quería que fuera una sorpresa, así que hasta que no estuviera acabado, no quería que ni tan siquiera imaginara, que Indalecio iba a tomar forma y ser nuestra creación!

Nunca antes había hecho un peluche inventado el patrón! Porque tengo a Matías, un mono de peluche que hice con los patrones de un libro -otro día os hablo de Matías-, y siempre me he confeccionado ropa, pero sacar de la nada los patrones de Indalecio y conseguir darle proporciones correctas, fue un reto para empezar y una enorme satisfacción el resultado. Bueno me dejo de bla, bla, bla... que parezco ya una mamá engreída de su niño y os presento a Indalecio 3D sin más preámbulos!



Os describo algunos de sus detalles... es de un tejido como de lanilla verde, tiene una cresta ondulada de fieltro naranja, que desde la cabeza le recorre todo el largo de la columna vertebral hasta acabar en una cola en forma de flecha...


... su estructura interior de alambre le permite girar y doblar su largo cuello y su cola, sus patas son articuladas (adelante y atrás... no nos pasemos pidiendo!) y tiene unas poderosas patas traseras...

...tanto las de delante como las de detrás están dotadas de unas uñas de fieltro de color blanco roto, al igual que la planta ...

... pero a pesar de estar dotado de recias patitas, éstas no son lo suficientemente largas como para evitar que arrastre su barriguita de escamas... (escamas que están bordadas con la máquina de coser en un programa de pespunte y con hilo de bordar tornasolado para darle mayor efecto y realismo)...
Su carita es muy graciosa con amplios mofletes, una gran y sonriente boca, una nariz como un pellizco (que aunque en la foto no se aprecia, sí que tiene una pequeña prominencia) y lo que más destaca son unos grandes ojos saltones, con espesos párpados que soportan sus largas pestañas que le dotan de esa mirada que enamora. Rematan su cabecita unos graciosos cuernos de color marfil ,que también es capaz de mover! Hacia dentro y hacia a fuera y hacerlos girar sobre sí mismos!

...tiene también un par de lánguidas orejas que le cuelgan por detrás de sus carrillos... y por último, aunque sus "padres" le dotaron de alitas, éstas no le sirven para izar su regordete cuerpo... mirar como suspira por alzar un día el vuelo...


...y dejar de "pasta de moniato" a esta perrita molestosa que le ataca en plena naturaleza... mordiendo su patita...

... y otro bocado en su colita...

... bueno mientras consigue volar y no, se entretiene en el jardín, le encantan las flores..

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... y trotar libre por la pradera florida...

... y a la hora de recogerse cada día pasan cosas como esta... se creerá que no le vemos?

Bueno mientras consigo que Indalecio entre en la casa para bañarse y cenar, me despido de vosotras con mucho cariño y rogando me disculpéis semejante elucubración y desvarío. Quiero pensar que os habéis divertido con el relato.

Gracias por la lectura y vuestras visitas!

P.D. Recordar que os he mencionado a Matías... jajaja por lo que, amenazo con volver cualquier día, al ataque con otra "animalada" como esta!